La historia es una suma de restos. Huellas con las que se interpreta el presente.
Pero siendo importante que existan, de nada vale si no se celebran, si no se les da un tratamiento adecuado. Como en otros lugares, Buenos Aires tiene varios cementerios venerados y frecuentados. El de Recoleta, en el noreste, es un compendio de nombres de la "buena sociedad" porteña. Descendientes de próceres de la patria y de todos sus poderes. La zona noble de la ciudad. Las fuerzas vivas se movilizaron para impedir que enterraran allí a la que resultó su huésped más popular: Evita. Lo que defendió en vida esa mujer, casada con un presidente de trayectoria militar, no les gustaba. Su defensa de los "descamisados". Una figura muy controvertida incluso para otros sectores de la población.
Al entrar en el recinto, una mujer con el pelo rubio teñido en no muy buen estado, recogido en una coleta, me detiene. Forma parte de la asociación que cuida del sitio y pide mi colaboración. Quiere que le compre una revista con los aspectos relevantes a visitar en el mausoleo. Entre ellos, un plano muy detallado sobre la ubicación de la tumba de Evita. La sorteo como puedo, rechazando educadamente su ofrecimiento. Me parece siniestra. Y no sé si está con Evita o contra ella. Qué pensaría la esposa de Perón de este personaje de estar viva. ¿Alabaría su instinto para buscarse la vida?
En Recoleta barrio se ve repetidamente una profesión curiosa. No es la primera vez que la había visto. Pero sí me sorprende la gran cantidad de profesionales del ramo. ¿Estarán asociados? Son los paseaperros. Pueden llegar a manejar a 30 animales simultáneamente. Cada uno con su propio lazo. No debe ser fácil caminar así y no caerse. Los sacan a pasear, los lavan y los llevan al veterinario. Los fines de semana la responsabilidad recae en los dueños de los mascotas, dice la guía Rough. Me quedo con ganas de hablar con alguno, pero me temo que no seré bienvenido y no lo hago. ¿Se rifarán a los cuidadores expertos?
Vuelvo de Tigre, en el Delta del Paraná [merecerá una entrada aparte]. A 45 minutos en tren desde Capital Federal. Como ha descrito tan bien el maestro de los narradores de viaje, Kapucinski, en su libro sobre África (de título Ébano), un medio de transporte con gente que sube y baja, va y viene, tratando siempre de sacar partido al momento. Con toda lógica, en esta línea, llena de turistas y excursionistas. Esto no es Capital Federal, sino el Gran Buenos Aires; donde se agrupa una población millonaria (en número) y trabajadora. Pasa un vendedor de chicles, de varios sabores, ofreciendo su producto a los pasajeros. También pasa un comerciante de Cd's, con los mejores éxitos de Música Latina. Recomienda vivamente a Chayanne. No creo que a éste le guste, a menos que le revierta derechos de autor.
Se presenta con una fotocopia este "niño de la calle, de familia pobre". El texto es claro: "Cualquier cosa me sirve, desde una moneda hasta un simple cariño". Vuelve y se lleva su papel. Llegamos a Tigre.
no te equivoques el mérito es de los perros, de los 30 a la vez , no de cada uno de ellos....es lo que tiene lo " colectivo " .Por cierto estás seguro que era indonesio /a , mira que las lenguas cuando no son ......te confunden.
ResponderEliminarJ.J Domingo